No pudo ser

Un Domingo con color muy otoñal, unas temperaturas muy suaves, algunas nubes y nada de lluvias permitían ver las gradas de Santa Cruz muy animadas de gente, dispuestas a animar a sus equipos en la segunda fase de La Copa RFEFA. Como en el primer partido la nueva normalidad llegaba al campo del Indus con gente portando mascarilla, separadas a 1,5 metros de distancia y sin poder levantarse del sitio.

A las 12 de la mañana comenzaba a rodar el balón por el campo de Santa Cruz. El conjunto de visitante no daba tiempo a nada y en tan solo 4 minutos ya lograba abrir el marcador con un tanto de Mendi. Tras el primer gol no se relajaban los del Marino y volvían a atacar pocos minutos después e incluso llegaban a encajar el esférico en la escuadra pero el gol era anulado por una falta sobre Iván Llamas, que durante unos minutos quedaba resentido en una de sus manos. El conjunto fabril no quería poner las cosas fáciles a su rival e intentaba cortar cualquier contra o jugada de peligro que pudieran crear los de Oli. Transcurridos 22 minutos de partido Nacho Matador aprovechaba un fallo en la salida con el balón de sus contrincantes, se hacia con la pelota, tiraba desde fuera del área y lograba una ventaja de 0-2 . Con una falta peligrosa llegaba la oportunidad para el Industrial de recortar distancias. El encargado de dar forma a esta acción era David que centraba al área donde se encontraba Chopa preparado para rematar, pero se resbalaba y un jugador rival despejaba el balón. El tercer tanto para el Marino de Luanco estuvo a punto de llegar en el minuto 36 tras una falta bastante peligrosa de Hugo sobre un jugador visitante. Era Nacho matador el que colocaba la falta, realizando un saque directo a portería, en un primer momento Llamas retenía el balón pero se le escapaba de las manos y por muy poco no entraba en la portería. La última oportunidad antes de que el árbitro pitara el final del primer tiempo era para los de Miguel Martín. Tras una proyección por banda derecha de David que centraba al área donde se encontraba Iñigo que remataba a portería pero el guardameta frustraba el intento de gol. Con dos goles en contra y ninguno a favor se finalizaba la primera mitad en Santa Cruz.

Durante el descanso el Gijón Industrial aprovechaba para sustituir a Hugo, que tenía tarjeta amarilla por Borja. Al inicio del segundo tiempo el conjunto fabril arrancaba con fuerza y en tan sólo cinco minutos lograba crear una ocasión bastante interesante. Una falta muy cercana al área que colocaba David pero que Borja Rodríguez despeja con la cabeza. Poco le duraba la alegría al banquillo local, el Marino de Luanco volvía a la carga, Chiqui lograba centrar sólo frente a Llamas que realizaba una gran parada impidiendo así el tercer gol en contra. Los nervios y la necesidad de que el Marino no siguiera marcando goles pasaron una mala jugada a los fabriles, en este caso a Diego que cometía un penalti sobre Luis Morán en el minuto 65 que Guille Pinin transformaba en el tercer tanto. Pese a tener un marcador completamente en contra y un equipo rival muy dominante el Gijón Industrial mostraba su carácter y sus ganas de luchar y no se rendían, e intentaban robar el balón y cortar las jugadas que el conjunto de Oli pudiera ir creando. En el minuto 71 llegó uno de los goles más raros del partido, tras un buen lío el área, con jugadores en el suelo, incluido el guardameta local, y buen barullo de pies intentando controlar el balón, Adolfo lograba empujar la pelota dentro y anotar el que sería el cuarto tanto del encuentro a favor del equipo de Luanco. El Gijón Industrial ya tenía todo perdido, con casi el tiempo agotado y muchos goles en contra pero eso no les frenaba para seguir corriendo, robando la pelota e intentado llegar a la portería rival. Finalmente el árbitro señalaba el final del encuentro con un 0-4 a favor del Marino de Luanco.

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