El Gijón Industrial se enfrentaba durante la mañana de ayer al Covadonga, un rival muy fuerte que jugaba con la ventaja de estar en casa. Una mañana poco agradable pasada por lluvia y temperaturas más bien invernales, aún así con bastantes espectadores para disfrutar de una mañana futbolera.
A las 12 de la mañana el balón comenzaba a rodar por el Álvarez Rabanal. El partido se iniciaba de la mejor manera para los locales que tan solo necesitaron dos minutos de juego para colocar el esférico dentro de la portería y sumar un tanto al marcador. El gol no hundía a los de Miguel Martín que rápidamente empezaron a trabajar para poner remedio a la situación. A los ocho minutos un centro de Kone a punto estuvo de lograr el empate pero Naya no llegó a tiempo para rematar la pelota. Minutos después volvía Kone a la carga que conducía el balón hasta cerca del área pequeña pero fallaba en el disparo a puerta. Su buena suerte llegaba en el 13 cuando el jugador fabril lograba regatear al portero local y disparar a puerta vacía logrando así el empate del encuentro y sumar el gol 2500 del club. Pasado el primer cuarto de hora el Covadonga se beneficiaba de una falta cercana al área que lanzaban directamente a las manos de Lastra. Durante los siguientes 10 minutos el conjunto de Fermín Álvarez apretaba a los fabriles, obligando al guardameta intervenir en varias ocasiones para que no se volviesen a anotar otro tanto. El Gijón Industrial no estaba quieto y lograba frenar los insistentes ataques locales. Pasada más de media hora atacaba Kone por la banda, que le hacía un pase a Migu quien centraba a Peláez a quien no le daba tiempo a llegar. Los últimos 15 minutos se hicieron algo pesados, porque más que juego lo que se producían eran faltas, haciendo del partido algo más lento de lo habitual. Entre falta y falta y sin más goles se consumía el primer tiempo.
La segunda parte comenzaba fuerte, el Covadonga no iba a ponerle las cosas fáciles a los fabriles y desde que se iniciaba el juego comenzaban con el ataque. Manu Blanco, jugador local, obligaba a Santi a despejar un balón muy envenenado. De nuevo el Covadonga se encontraba en área rival, en este caso Edu Font disparaba a portería, pero Chus muy atento salía de ella apresuradamente y se hacía con la pelota. La ocasión más clara de la segunda parte del conjunto local llegaba en el 63 cuando Jaime disparaba a portería y el balón no entraba por chocar con el palo de la misma. No todo eran ataques del Cova, los de Gijón también lo intentaban, aunque no llegaban tantas veces como el conjunto local. En el 70 era Diego, jugador del Industrial quien despejaba un balón que iba en dirección a la portería. Los últimos minutos fueron muy intensos, con los de Oviedo dominando el juego, llegando a lograr hasta tres cornes consecutivos, pero los fabriles supieron defender la portería y lograban obtener un punto de los tres en juego en un campo muy complicado.
El próximo partido del Gijón Industrial será el Lunes día 9 de Septiembre a las seis de la tarde en Santa Cruz frente al Condal.